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Redes

Llegaron para quedarse y ya son imprescindibles en nuestra vida.

Cuando unas desaparecen nacen otras. Se reinventan para no morir. El usuario manda y ellas se adaptan. Cada una con su personalidad. Con sus peculiaridades. Con su gente.

Capaces de despertar los sentimientos más dispares, no a todos nos gustan las mismas redes. Rechazo, pasión, indiferencia…. Si una te divierte, otra te aburre. Cada una de ellas tiene su público y consume la información en diferentes formatos.

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“Lo que ocurre en las Vegas se queda en las Vegas. Lo que ocurre en Twitter se queda en Google para siempre.”  Jure Klepic

Facebook, la plataforma más famosa, se ha situado a la cabeza de las más utilizadas durante años. Quizá la red más amable. Perfecta para mantenerse en contacto con los amigos y recuperar antiguos contactos. Muy atractiva por su usabilidad, en sus muros aparecen todo tipo de publicaciones en formato de vídeo, imagen o texto. Con el público más maduro, sigue cayendo por la migración a otras redes y escándalos como el de la protección de datos.

Instagram, especializada en fotografía y vídeos no para de crecer. Si Facebook es grande por el número de usuarios, Instagram lo es por su glamour. La preferida por los influencers que marcan tendencias. Los más jóvenes la consideran su red más importante y la mayoría la usan a diario. Una plataforma que seguirá en alza, y que hoy es una de las más codiciadas por las empresas para su marketing digital.

Twitter. Su público es curioso, con inquietudes. Nos permite estar informados al minuto de lo que ocurre en el mundo. La información se consume a una velocidad de vértigo. Experimenta una importante tasa de abandono a pesar de los esfuerzos por reinventarse. Aun así, sigue siendo un referente para la interacción y el debate en temas de actualidad.

Linkedin se nutre de un público técnico y profesional. Es perfecta para abrir puertas al mundo laboral. Localizar a compañeros de otras compañías. Crear coworking. Buscar proveedores y clientes. Cuando te relacionas en Linkedin, refuerzas tu marca personal. Un referente en la búsqueda de empleo. Una plataforma que debería estar en el curriculum de todos.

Freelance ya está presente en todas ellas para comunicarnos entre nosotros y con el resto del mundo. Sea en Facebook, Twitter, Linkedin o Instagram, nos vemos en las redes.